Una infografía básica contiene tres elementos clave: datos, elementos visuales y texto. Los datos se representan en forma de números y estadísticas, los elementos visuales se utilizan para ilustraciones y gráficos, y el texto se emplea para proporcionar contexto y explicaciones. Al combinar estos tres elementos, una infografía es capaz de comunicar información compleja en un formato sencillo y fácil de entender. Las infografías básicas pueden utilizarse en sitios web, presentaciones, boletines electrónicos y material impreso. Una infografía puede ser útil en cualquier lugar donde necesite destilar información compleja en un formato sencillo y fácil de entender. Cuando se utilizan correctamente, las infografías pueden ser una herramienta de marketing increíblemente poderosa. Pueden ayudarle a transmitir su mensaje con mayor eficacia y llegar a un público más amplio. Uno de los aspectos más importantes de una infografía es su capacidad para contar una historia. Una infografía bien diseñada debe ser capaz de llevar al espectador en un viaje, de principio a fin, de una manera que sea a la vez atractiva e informativa. Para ello, la infografía debe elaborarse cuidadosamente, con cada elemento trabajando