Un gráfico en blanco es un gráfico o diagrama en el que aún no se han introducido datos. Se utiliza como plantilla en la que se pueden introducir los datos para ver con más claridad las tendencias y patrones generales. Los gráficos en blanco se utilizan a menudo en entornos empresariales y de investigación, ya que pueden ayudar a visualizar conjuntos de datos complejos y facilitar su comprensión. A veces, también se pueden utilizar gráficos en blanco con fines decorativos. Al crear un gráfico en blanco, asegúrese de incluir todos los elementos necesarios. Los gráficos en blanco más básicos constarán de un título y ejes sobre los que se pueden trazar los datos. Sin embargo, los gráficos más complejos también pueden tener etiquetas, cuadrículas u otras características que pueden ayudar a que los datos sean más fáciles de interpretar. Asegúrese también de que el gráfico es lo suficientemente grande como para dar cabida a todos los datos introducidos en él y a cualquier etiqueta u otras características incluidas. Una vez creado un gráfico en blanco, puedes utilizarlo de varias maneras. Lo más probable