Siempre es una decisión difícil cuando llega el momento de despedir a un empleado. No importa qué palabras elijas decir o qué justificación ofrezcas, el hecho es que alguien pierde su trabajo. Nunca es fácil decirle a alguien que sus servicios ya no son necesarios. Aun así, es importante recordar que siempre es mejor despedir a alguien con dignidad y respeto que forzar su salida. O peor aún, permitir que permanezca en un trabajo que ya no quiere o no necesita. Reducir la plantilla puede ser un proceso complejo para todos los implicados. Sin embargo, con la preparación adecuada, puede hacerlo de forma que minimice el estrés y las consecuencias. He aquí algunos consejos para despedir a alguien: - Prepárese para la reunión de notificación. Una reunión de notificación, o notificación de reducción de plantilla (RIF), es el momento en que el empresario notifica formalmente al empleado que su empleo ha terminado. Prepárese mental y emocionalmente para esta reunión y tenga preparada toda la información pertinente. - Proporcione al empleado los recursos necesarios para ayudarle en la transición. Es esencial proporcionar a los